Investigación
y empoderamiento social. Un reto para el trabajo social venezolano
… si no somos capaces de pensar en qué momento
histórico vivimos, cualquier teoría se aplica. Y al aplicarse de cualquier modo
las teorías, la única función que cumplen en definitiva es impedirnos ver la
realidad. Esta es una lección de la tradición y un desafío del momento actual.
(Hugo Zemelman).
Introducción
El
proceso de cambios que vive Venezuela en la actualidad, tiene su punto de
inicio a partir de los acontecimientos del 27 y 28 de febrero de 1989, los
intentos de golpe de estado de 1992 y la llegada de un nuevo proyecto político
en 1998 hasta nuestros días, cuyo discurso sobre democracia protagónica y
revolucionaria ha desatado un impacto esperanzador en los sectores populares
por su promesa de cambio y creación de espacios para el empoderamiento social.
Este
discurso aparece entonces como un resultado, una respuesta a las demandas de amplios
conjuntos sociales en razón de una recomposición de las relaciones de poder (Romero,
2006), que no se circunscribe sólo a la esfera política sino que inunda todas
las esferas de la vida social, por lo que su aplicación exitosa constituye un
reto, para los profesionales venezolanos, incluyendo a quienes ejercemos el
Trabajo Social, comprometidos con una posición crítica y reflexiva.
En
correspondencia con este compromiso, nos proponemos aprovechar la oportunidad
que nos brinda la I Convención Nacional de los Trabajadores Sociales y las
Trabajadoras Sociales para plantear algunas ideas sobre empoderamiento y sus
vinculaciones con investigación social con el propósito de debatir en torno a
los retos del Trabajo Social venezolano.
1
Sobre el Empoderamiento Social
Partimos
de la idea de que aún cuando en la Constitución de la Republica Bolivariana de
Venezuela se establecen los fundamentos teóricos para emprender la superación
de la democracia representativa por una democracia participativa y protagónica,
que instaura el poder para el pueblo, poco se dice de las bases metodológicas y
prácticas que pueden hacer posible este proceso de Empoderamiento Social.
La
palabra Empoderamiento proviene del inglés Empowerment. En español se tiene el
término Apoderamiento, derivado del verbo apoderar, que significa: ‘dar poder a
otro sobre mis pertenencias o mi propiedad’, apoderamiento, por tanto, sería el
acto de conferir, entregar poder, que no es el caso específico, establecido en
la referida Constitución. Se trata de la instauración del poder, que es asumido
por el pueblo en pleno ejercicio de sus derechos, a través de vías
democráticamente instituidas, sean estas un acto electoral, un órgano como las
mesas técnicas de agua o las diversas formas de contraloría social.
Empoderamiento,
es una estrategia organizacional que brinda la oportunidad a los
miembros de los equipos para involucrar-se, liberando sus capacidades en
la determinación del éxito o el fracaso.
(Blanchard, 2000).
En
diversas experiencias el Empoderamiento, ayuda a los líderes a hacer cambios fundamentales
aprovechando los conocimientos, habilidades, experiencias y motivación de las
personas, siendo aceptado por las personas porque les da la satisfacción
derivada de la implicación, un sentimiento de propiedad y crecimiento.
Un
aspecto básico del Empoderamiento es dar a la gente autoridad y responsabilidad
en la toma de decisiones importantes. Su verdadera esencia, procede de la
liberación de los conocimientos, la experiencia y la capacidad de motivarse que
ya tiene la gente.
La
aplicación del Empoderamiento ha sido estudiada a nivel empresarial, por el
Centro de Eficacia Organizativa de la Universidad de Carolina del Sur,
demostrando que su utilización ha tenido éxito, según estas investigaciones
cuando los empleados tienen mas control y responsabilidad en su trabajo, las
empresas logran un mayor rendimiento.
El
Empoderamiento ha sido utilizado en Venezuela, antes de 1999, pero han sido experiencias
aisladas que han sucumbido o han tenido un impacto reducido al no tener el
apoyo gubernamental, como es el caso de las cooperativas.
De
estas experiencias se puede advertir que a pesar de sus bondades no es fácil
llegar al Empoderamiento.
La
base de estas dificultades está en el gran cambio en la manera de pensar que
deben hacer tanto los dirigentes como la gente en general para llegar al Empoderamiento.
Porque, entre otras razones, “es más fácil hablar de Empoderamiento que
aplicarlo”.
Por
un lado, los líderes no están suficientemente preparados para entregar el
poder.
Por
otro lado, la gente no está automáticamente preparada para asumir los retos de
tomar el poder.
Un
cambio de esta envergadura, requiere reconocer los fundamentos teóricos que sostienen
este proceso, así como los métodos y procedimientos para su aplicación exitosa.
1.1
Las nociones fundamentales del
Empoderamiento
Ken
Blancchard y otros (2000) en su libro “Las 3 Claves para el Empowerment” señala
la existencia de nociones fundamentales para liberar la capacidad de las
personas, esto es para lograr que asuman su poder, partiendo de la decisión de
una organización de aplicar el Empowerment, los cuales pueden ser aplicados al
caso del Empoderamiento Social.
Según
este autor los elementos básicos del empoderamiento, se resumen en tres:
•
Las claves para su implantación
•
Las fases del proceso
•
El liderazgo situacional
A
continuación pasaremos a describir cada uno de estos tres elementos, en el
contexto del Empoderamiento Social que se efectúa en nuestro país, liderizado
por el presidente Hugo Chávez.
1.1.1
Las claves para la implantación del
Empoderamiento Social
Han sido descritas como:1) Compartir la
información con todo el mundo, 2) Potenciar la autonomía a través de los
límites y 3) Sustitución de la Jerarquía por equipos autodirigidos.
1.1.1.1
Compartir
la información con todo el mundo:
Los líderes se
disponen a desprenderse de información que no es habitual compartir, esta clave
es importante porque tener información promueve responsabilidad en la gente, da el impulso
inicial que es esencial para el éxito.
Esta
es precisamente una de las claves que ha sido, primeramente, utilizada por el
Presidente, mediante el Programa Dominical ‘Alo Presidente’. A través de este
Programa describe su gestión gubernamental, desde contar como fue todo un viaje
en funciones presidencial, hasta como tomó una decisión importante de su
gabinete de gobierno, con quien tiene que compartirla, con todo el pueblo. A su vez las personas que lo escuchan pueden
llegar a sentirse co-responsables en las decisiones tomadas por el Presidente.
Si
alguna falla se advierte en la aplicación de esta clave es no haber podido
inyectar a todo el gabinete e incluso transmitir a todos los poderes de la
republica este mismo accionar. Esto es la aplicación de la misma clave
‘compartir información’ con los miembros de la organización en todo el
entramado organizacional, en el cual el propio Presidente sirve de modelo.
Como
se señalaba anteriormente no es fácil para los líderes (exceptuando a Chávez
con su programa), entregar el poder que les da tener la información
1.1.1.2
Potenciar
la autonomía a través de los límites:
Se trata de establecer los límites que adoptan la
forma de declaraciones, en las cuales se demarcan los alcances y trascendencia
que tendrá el propósito real del Empoderamiento.
La
mayor declaración de Empoderamiento Social está contenida en la carta
fundamental de la República por lo que se hace de obligatoria lectura, estudio
y comprensión para todos aquellos sectores del pueblo, para toda la gente.
Además del marco jurídico, están el marco de las declaraciones gubernamentales
con la existencia de determinados ministerios e igualmente las declaraciones
discursivas internacionales.
Desde el preámbulo y en todo su articulado la
Constitución Bolivariana se presenta como Patrimonio del pueblo soberano, quien
decide sobre el modo y la forma de ser su propia existencia política. Se establecen
los límites de la soberanía originaria del pueblo como legitimo depositario del
poder constituyente, a partir del cual se crea el marco constitucional a través
de la Asamblea Nacional Constituyente, con debates televisados para todo el
pueblo.
1.1.1.3
Sustitución
de la Jerarquía por equipos autodirigidos:
La conformación
de equipos autodirigidos trasciende la idea de los equipos
participativos, puesto que se espera que tomen, ejecuten decisiones y se responsabilicen
de los resultados.
Quizás en este punto está una de las mayores
dificultades para la implantación del Empoderamiento en las diferentes
organizaciones, precisamente por un problema que ya se ha señalado, “la gente
no está suficientemente preparada para asumir el poder establecido (en este
caso), en el marco constitucional’.
En Venezuela, se han venido creando,
ensayando y cambiando formas organizativas dirigidas a fomentar los equipos
autodirigidos. Tal es el caso del impulso gubernamental que se le ha dado a las
Cooperativas, los Comités de Participación Local, la Mesas Técnicas de Agua,
los Núcleos de Desarrollo Endógeno y los Consejos Comunales entre otras formas
organizativas.
Considero que aún es muy pronto para dar
resultados de estos esfuerzos, en cuanto al logro de alcanzar el Empoderamiento
Social y se impone la urgente necesidad de efectuar un monitoreo de tales
procesos.
1.1.2
Las fases del proceso de Empoderamiento.
Según
el mismo autor son: Emprender y dirigir el viaje, Cambio y desaliento y, por
último, Adoptar y perfeccionar el empoderamiento
1.1.2.1
Primera
Fase: Emprender y dirigir el viaje:
Implica asumir el Compromiso y acompañar tal compromiso con la acción
directiva consecuente.
Este paso contiene un cambio hacia
situaciones hasta ahora desconocidas, que comienzan a generar preocupaciones
personales y de información, relativas a situaciones como: hasta dónde llegará
el proceso, cómo me afectarán los cambios que se anuncian, qué debo saber
además de lo que me informan.
1.1.2.2
Segunda
Fase: Cambio y desaliento:
Se describe como un momento de miedo y de duda, por cuanto ya se conoce
donde se desea llegar pero todavía no se sabe como llegar.
Las Preocupaciones en esta fase son,
fundamentalmente, por la ejecución y por el impacto de las acciones, en razón
de determinar si estas acciones nos llevarán al resultado esperado.
1.1.2.3
Tercera
Fase: Adoptar y perfeccionar el Empoderamiento:
Una vez adoptados nuevos hábitos,
actitudes y conductas la preocupación está centrada en la colaboración y el
perfeccionamiento de tales conductas.
Un rápido análisis de la situación actual,
nos lleva a pensar que el proceso de Empoderamiento Social, se encuentra entre la
primera y la segunda fase, dado que se ha emprendido el viaje y se ha definido
el cambio hacia una sociedad socialista
del siglo XXI, sin embargo se presentan preocupaciones personales sobre lo
acertado de este camino; así como miedos
y dudas sobre como hacer para llegar al propósito planteado.
Se requiere por un lado, que algunos líderes
e incluso algunos sectores de la población (que aún tienen desconfianza) asuman
el compromiso de cambio y ‘emprendan el viaje’. Por otro lado, que la
preocupación esté centrada en definir si la ejecución es exitosa o no y en
precisar el impacto de las acciones en relación del resultado que se
espera.
1.1.3
El liderazgo situacional.
Supera la idea del liderazgo tradicional basado en la dirección, control
y supervisión e incluso en apoyar, animar y facilitar. Lo deseable es que la
dirección y el apoyo partan de la iniciativa propia y de los equipos
autodirigidos. Se propicia de esta manera el Autoliderazgo, a partir del
desarrollo de competencias (conocimientos y habilidades) y compromiso
(motivación y seguridad). La meta es lograr la implantación del Liderazgo, como
proceso en toda la organización social, con lo cual se lograría la mayor suma
de satisfacción e integración social.
Se espera que el avance hacia el dominio de
competencias, sea impulsado a través de programas educativos masivos como las
Misiones: Robinsón I y II, Rivas, Sucre, la creación de la Universidad Bolivariana,
cuyo propósito general es la elevación del nivel formativo, fortaleciendo
además la primera fase del Empoderamiento Social.
El fortalecimiento del compromiso, mediante
acciones de motivación que además brinden seguridad, como la implementación de
la Misión Salud denominada, Barrio Adentro, la Misión Alimentación identificada
con el establecimiento de los mercados (MERCAL)
y la garantía de puestos de trabajo para desarrollar tales postulados.
Las nociones expresadas sobre empowerment
como estrategia organizacional aplicada a las acciones de empoderamiento social
en nuestyro país, nos permiten explicar en cierta medida los obstáculos que su
implementación real ha tenido en todas las instituciones de la sociedad
venezolana, relacionándolos con las claves para su implantación, con el nivel
en el que se encuentra su implementación y con limitaciones al asumir liderazgo
situacional.
Una ampliación de esta discusión implicaría
profundizar, desde una perspectiva histórica, mediante el develamiento de otras
dimensiones del problema referidas a las
relaciones de poder, no solo a nivel nacional sino también mundial; a los
procesos interactivos, comunicativos y de construcción de imaginarios insertos
en esas relaciones, en los cuales ocupa lugar central las construcciones
sociales sobre las diferencias entre democracia formal y participativa, como
referente en las posibilidades de transformación de las situaciones. Aspectos
que por razones de tiempo y espacio serán tratados en posteriores
oportunidades.
1.2
Vinculaciones entre
Empoderamiento, investigación y Trabajo Social en el contexto venezolano.
El contexto histórico venezolano plantea un
proceso de transformaciones que demanda cambios en las prácticas de Trabajo
Social, especialmente nos referimos en esta exposición a los procesos de
empoderamiento social iniciados por el actual proyecto político.
Hablar de empoderamiento implica reconocer su
condición de proceso histórico y multidimensional porque no es sólo tiene una
dimensión política es también un proceso social, económico, psicológico, cultural
todo al mismo tiempo y en forma simultánea ubicado en el momento histórico en
el que acontece.
Es un proceso transformador que modifica la pasividad
de los sectores populares excluidos del sistema social, abriendo espacios para
la participación y el protagonismo, implicando un desafío en el ámbito de las
ciencias sociales y, por consiguiente, en el Trabajo Social.
Cuando colocamos la mirada en los obstáculos
para implementar procesos de empoderamiento social, resulta involucrada la
investigación como poderoso instrumento que abre posibilidades a los excluidos
para modificar y superar las dificultades encontradas en tales procesos, según
las especificidades de poder que como actores sociales definen para sí mismos
hacia la construcción de un nuevo proyecto histórico.
En consecuencia, asumir las claves del
empoderamiento tiene implicaciones que resaltan la investigación en el
ejercicio del Trabajo Social venezolano. Una investigación social que sustituye
la consideración del sujeto por la de actor social en razón de ser protagonista
de su destino.
Un Trabajo Social crítico, comprometido con
los sectores excluidos, tendría que asumir como reto para estos/as
profesionales asumir las claves del empoderamiento, contribuyendo a generar
procesos reflexivos donde la voz de los excluidos tenga la fuerza suficiente
para participar con sus saberes en las disertaciones que sobre ellos se
construyen.
Asumir está perspectiva se semeja a lo
planteado por Faleiros (2003), con el paradigma de correlación de fuerzas,
definido por este autor como una concepción que entiende Trabajo Social como
enfrentamiento de intereses, recursos, energías, conocimientos inscrita en
situaciones de hegemonía, dominación y conflicto desarrollados por los grupos sociales
a partir de sus proyectos sociales fundados en relaciones de poder.
Estas relaciones de poder por sus
contradicciones abren espacios de saber y poder profesionales generando modos
de acción restringidos o interacciónales (entre profesionales y personas
involucradas) y amplios o interinstitucionales siempre en alianza con los
sectores excluidos con base en las dimensiones de identidad, autonomía y
ciudadanía.
Se trata de una práctica crítica capaz de
generar conocimientos mediante procesos de interpretación - transformación, que
valoren la complejidad de lo cotidiano. Una práctica liberadora que desarrolle
profesionales capaces de compartir la información entre sí y con los miembros
de las comunidades, propiciando el desarrollo de conocimientos y habilidades
con compromiso social.
Con este propósito se requiere conformar
colectivos profesionales que, con base en el empoderamiento, estén dispuestos a
explorar, reconocer y apreciar los saberes sociales asumiendo el cuestionamiento
al papel del experto, como una forma de superar los condicionamientos
hegemónicos diseccionados por la colonialidad del saber.
Se trata de potenciar tales experiencias
desde la formación universitaria de Trabajo Social de manera que podamos invitar
a los estudiantes de Trabajo Social a apropiarse de tales iniciativas,
promoviendo así el empoderamiento desde los espacios formativos.
En consecuencia, para cumplir con este reto urge
explorar diversas orientaciones teóricas con el objetivo
de definir modalidades de acción e investigación con potencial epistémico para
fortalecer el ejercicio de la participación protagónica de los sectores populares
tradicionalmente excluidos. Esto implica desarrollar relaciones simétricas
entre actores que intercambian saberes como uno más de estos actores, en otras
palabras asumiendo las nociones de empoderamiento social como opción
liberadora.
Referencias bibliográficas
Blanchard, Ken (2000). Las
Tres Claves para El Empowerment. Editorial Granica. Barcelona.
Faleiros, Vicente (2003)
Estrategias de Empowerment en Trabajo Social
Lander, Edgardo (2000).
Conocimiento para que? ¿Conocimiento para quién? Reflexiones sobre la
universidad y la geopolítica de los saberes hegemónicos. Revista Venezolana de
Economía y Ciencias Sociales UCV.